sábado, 22 de junio de 2013

Venezuela rechaza la discriminación

Jamás pensé que algún día iba a escribir sobre este tema, pero es tanta la indignación y la rabia, que uno se siente obligado a expresar el rotundo rechazo ante las acciones discriminatorias de unos pocos contra una persona de color y precisamente por ser en nuestro país, plagada de una historia rica de mucho mestizaje entre indios, blancos y negros.
Nuestra sociedad no se caracteriza por este tipo de actos racistas, aunque tampoco podemos negar que siempre hay indicios de discriminación en muchos de los momentos de la cotidianidad; sin embargo, no alcanzan los niveles de anarquía e intolerancia que en otros países sufren con mayor intensidad.
Carl Herrera, quien es el primer venezolano en debutar en la NBA, actual dirigente de Gigantes de Guayana y quien fue premiado como el mejor técnico del año, tuvo que soportar la inmadurez y los insultos de un “grupito”, incluso con objetos en las manos, los ataques racistas durante la noche del pasado lunes en el Pedro Belisario Aponte de la ciudad de Maracaibo. Independientemente de la causa que pudo generar este malestar entre los fanáticos, alcanzar estos extremismos es motivo suficiente para que las autoridades ejerzan acciones rápidas y contundentes para que esto no se vuelva a repetir.
Herrera, fue el primero en expresar su malestar,  declarando estar cansado de esta situación y le pide a la Liga “tomar cartas en el asunto”. También, denunció que su esposa fue víctima de agresiones verbales.
Seguramente vendrán las reacciones por parte de la Liga, esto no debe requerir de mucho análisis y conclusiones. Sencillamente, fanático que cometa alguna conducta inapropiada debe ser retirado de las instalaciones y de ser posible sancionarlo. Seguimos sumergidos en una profunda crisis cultural, reflejados en estos destellos de ataques contra nuestra sociedad.