jueves, 13 de junio de 2013

¡Al "Diablo" con la cenicienta!

Lo pasado es pasado, dice una canción y recordar es vivir, un refrán. Sin embargo, hay que vivir el presente, y del presente muchos, a veces, no les gusta hablar bien. Hasta son capaces de echar por la borda su imagen, a cambio de evitar lo inevitable. Irrespetuosas, ridículas e inmaduras fueron las palabras de Marco Etcheverry contra la Vinotinto, a pesar de desmentirlas posteriormente.
A tan solo unos días para el choque premundialista entre Bolivia y Venezuela, el “Diablo”, como mejor es conocido, intentó despertar a la afición boliviana el entusiasmo de apoyar a su selección, cuando la boletería no alcanzaba 1.000 entradas vendidas de 23.000 disponibles. ¡Qué vergüenza!
Por ahí aseguran que los colombianos, a principios de los 80, inventaron la expresión “cenicienta” para los equipos flojos en el fútbol. Pues sí, resulta que en el pasado fuimos la cenicienta del fútbol sudamericano, pero eso ya es pasado. Hoy vivimos nuestro presente y además de coronar mises, hacer telenovelas, exportar peloteros y crecer deportivamente, ahora jugamos buen fútbol, nos respetan e incluso algunos nos temen. La selección de Bolivia está sumergida en una profunda crisis futbolística desde hace más de 10 años. Por todo esto: ¿quién es la actual cenicienta?
No es la primera vez que la Vinotinto recibe descalificaciones. Los chilenos fueron más creativos durante la Copa América 2011, con la publicidad de una telenovela. La desesperación de algunos los llevan a declarar improperios vulgares, que en vez de destruir, más bien sirven para motivar y acrecentar ese deseo por clasificar al Mundial.